Preservar generaciones de tradición, la cultura de lo artesanal heredada de nuestras madres y abuelas, de sus fogones, el trabajo cooperativo en el seno de la familia salpimentado con un ambiente festivo: botes de vidrio, aceite, sal y el atún procedente del quiñón de la marea (pequeña parte de las capturas que nos corresponde a cada marinero para compartir con nuestros seres queridos). En la tradición habita la cultura del respeto. Cada bote de atún nos recuerda con exactitud nuestros orígenes, nuestra realidad marinera y tradición gastronómica.

Saborear el respeto por la Mar en cada degustación de un lomo o una ventresca es un objetivo prioritario, desde sus inicios, para el proyecto de ORPAGU Pesca de Anzuelo.
En los días de faena, en altamar, no medimos por toneladas nuestras capturas. Los atunes los pescamos con anzuelo, pieza a pieza. Desde ORPAGU, todos los programas de desarrollo en los que trabajamos navegan en un solo rumbo: en el del mantenimiento sano de los recursos pesqueros. Sabemos con certeza que solo desde esa demora podremos seguir transmitiendo a las generaciones venideras la riqueza cultural que heredamos.

JOAQUÍN CADILLA CASTRO
Presidente de ORPAGU